Autor

Mia

Mostrando

Rentamos una casa con Will, te lo juro, que no teníamos ni un colchón donde dormir, pero nosotros estábamos en modo “pa’ las que sea”, y estaban mis ángeles ayudándome, porque pudimos rentar una casa amoblada, lo cual en su momento fue de gran ayuda, aunque lo no tan bueno, es que nos echamos con la conchudez, y por un año, no sentimos para nada la necesidad ni la presión de comprar nada, de ese primer año, no te puedo decir que todo fue una luna de miel, teníamos buenos momentos, Will era un hombre muy responsable y buen proveedor, yo también trabajaba en un resort limpiando, seguía estudiando ingles – por mi cuenta con el acompañamiento de un gran amigo online -, Ana ya estaba en una nueva escuela, con la fortuna de que su maestra era una dulzura de persona, Helenita en casa, me ayudaba un montón mientras…

En todo este proceso de aceptarme y quererme con lo que soy y con lo que hay, me he preguntado mucho, ¿por qué crecemos con la convicción de que para conseguir lo que queremos o lo que soñamos, tenemos que lucharlo y sufrirlo al máximo?, ¿por qué nos cuesta tanto fluir con lo que hay, y agradecer por las cosas buenas que llegan a nuestra vida porque si?; mi conclusión es que sufrimos mucho las cosas, las relaciones, las situaciones, no solo por falta de merecimiento, sino también, por miedo; aguantamos relaciones de mierda, por miedo a la soledad, por miedo a que nadie más como él llegara; y si lo analizamos, hacemos lo mismo con las amistades, con los trabajos, los negocios mal hechos, en fin. Yo estaba en esa misma posición, pensando cómo me iba a casar tan rápido con alguien, que conocía realmente hace 4 meses, me…

Yo estaba en una encrucijada muy fuerte, porque tenía mi apartamento en Colombia, nuestras cosas, ya que todo estaba completamente amoblado, y más que lo material, era una vida entera allá; ¿qué debía hacer? Solo necesitaba tiempo y que Alan apoyara esos meses adicionales que significarían un poco más de tranquilidad para mí, lo que significaba también bienestar para Ana, porque también tendría más tiempo para ella en casa, ya que no tendría que trabajar como antes, pero no había poder humano con ese man y el tiempo se me estaba acabando, entre abogados, peleas con ese Alan y lidiar con la metiche de mi ex suegra, ya me quedaba solo 1 mes de estadía en Orlando. Una noche, salimos a comer con Will después del trabajo y si lo note bastante diferente; aunque no me robo la paz, lo que no pude fue evitar preguntarle ¿qué pasaba? A lo…

Yo no tenía pensado quedarme a vivir aquí, jamás lo planeé, incluso, mi mama y papi me insistían desde años atrás, pero como les comenté en capítulos pasados, ni siquiera había hecho el esfuerzo de solicitar la Visa de turista, porque a Alán no le gustaba para nada, así que no era prioridad para mí; sin embargo, para ese momento, yo solo había planeado quedarme dos meses, y según lo que teníamos organizado con Will, en julio de ese mismo año, nos veríamos en mayo, en México, para el matrimonio de su hermano mayor, y luego él viajaría a Colombia para el verano al menos por una semana, y ya después vendría yo de nuevo a Orlando para diciembre, entonces podríamos “sobrellevar” la relación que hasta ahora estaba empezando. Sí, teníamos planes a mediano plazo, pero eran más bien planes, intentando conocernos más pese a la distancia; yo no me…

Regresamos a Colombia en enero de 2016, después del mes de vacaciones con mi familia, me sentía bastante recargada. Si bien ya no sentía el mismo desespero por buscar pareja, y ya estaba dominando poco a poco el miedo a la soledad, siempre estaba presente el cuestionamiento de “alguien llegará?”, “será que podré tener un compañero de vida?” pero me hacía la loca para no enfocar toda mi energía en eso. Empecé a estudiar un par de días en la semana en la noche, estaba trabajando muy enfocada con Vero y estaba super dedicada a importar accesorios y contraté un señor que prestaba servicio de mensajería de manera independiente, eso me daba la posibilidad de vender online y enviarlos a domicilio, así que no había mucho tiempo para una pareja. No puedo negar que muchas veces pensé en la posibilidad de que tal vez con el pasar de los meses…

Mi mamá rehizo su vida con un hombre maravilloso hace 18 años, – si haz leído todos mis capítulos, sabes de lo que hablo – y sino, en resumen, ella ya tenía dos divorcios encima, tres hijos y dos nietos, cuando conoció a este ser lleno de nobleza y hago énfasis en los hijos y nietos, por si eres mamá soltera y/o pasaste de los 30 o 40 y estás convencida de que te quedarás sola porque nadie se fijará en ti, para que veas lo equivocada que estás. Papi, como le llamamos mis hermanos y yo de cariño al esposo de mi mamá, ha vivido en Estados Unidos por los últimos 40 años, así que después de un noviazgo a distancia de casi 3 años, ellos se casaron y mi mamá se mudó con él a la Florida. En varias ocasiones, mi mamá nos decía a Helenita (quien es…

Y es que después de mi divorcio con Alán y mi ¨ruptura¨ con Esteban, quien fue el que claramente me mandó a la luna, porque mi incapacidad de tomar decisiones por mi misma y en pro de mi bienestar se apoderaba de mi, estaba convencida que había alguien que me pudiera querer como yo no era capaz de quererme, alguien que me reconociera, que le pusiera una curita para unir todos mis pedazos y claro, en consecuencia a mi necesidad, miedo y desespero, me metía con cualquiera. Aquel personaje ni siquiera tiene responsabilidad en todo esto, la asumo yo, ¿por qué? porque fui yo la que tomé decisiones estúpidas pensando en que ¨tal vez con este si¨, y este chico (que para ser honesta, no recuerdo su nombre) era menor que yo ¡13 años! Ósea, ¿en qué carajos estaba pensando yo? de verdad, ¿un niño que estaba viviendo su vida…

Hoy, después de casi 7 años, miro hacia atrás y puedo decir que sobreviví a una relación narcisista y que mi desconocimiento, unido a mi ausencia de amor propio, pegado a todas las ideas que tenía en mi cabeza acerca del amor, me llevaron a ser permisiva y a poner mi corazón en manos equivocadas. Esteban fue toda una universidad para mí en muy poco tiempo y si has leído mi blog completo, sabes de lo que hablo. Pero con todo y la relación tan dolorosa que viví con él, jamás pensé que estaba con un narcisista, porque ellos tienen tanto “poder” o más bien, tienen tanta facilidad de manipular a las personas que los quieren, que logró convencerme y hacerme sentir día a día que yo era muy poco. Siendo mayor que él, recién separada y sumándole una hija, mi sensación de “que poco soy para él” se mantenía…

Vengo de una familia donde la figura paterna brilló por su ausencia. Fui criada por mi bisabuela y mi abuela materna. Mi bisabuela, a pesar de la época, fue una chica rebelde y jamás se dejó “pisotear” por un hombre. Se enamoró muy joven de un señor a quién solo ví una vez en mi vida ya casi moribundo, pero él jamás estuvo presente en la vida de Helenita, mi bisabuela nunca le pidió nada para su hija, y este señor por su parte, jamás se interesó por tener una paternidad responsable y activa con ella. Después de un par de años, mi bisabuela se enamoró de otro señor, con el que tuvo su segundo y único hijo varón, con él, sí construyeron una familia y fue ese señor quién se convirtió en una figura paterna para Helenita; pero la “luna de miel” no duró mucho, porque a pesar de…

¿Recuerdan a Johana? ya vamos para 25 años de conocernos, de llorar y reír juntas, de pelear y agarrarnos por terceros y de odiarnos un poco, aquí seguimos juntas, como el vino… añejando y sobre todo estrellándonos porque nos negamos a ver lo que tenemos frente a nuestras narices. Pero ella al igual que yo, es lo suficientemente terca para fijarse en viejas que son inestables emocionalmente hablando porque le encanta el papel de mamá, de mujer abnegada e incondicional, ella en una relación se entrega literal en alma, vida y corazón y no mide consecuencia ni mucho menos se trata con un poco de consideración a sí misma, se ciega por completo y entrega incluso más de lo que tiene. Ella es una amiga muy incondicional – debo decirlo – y fue así, cómo inició su relación con Pamela, se conocieron por una amiga en común y aunque Pamela…